Celebrando los 60 años de Dr. No
Crónica de Óscar Rubio:
Había muchas ganas de celebrar el 60 cumpleaños de James Bond en el cine. Ya que el pasado 5 de octubre, día de James Bond, no pudimos juntarnos y cada uno lo celebró a su manera, decidimos que el domingo 9 lo celebraríamos por todo lo grande, al más puro estilo Bond… en un Casino.
Sobre las 11:45h ya fueron llegando algunos de los agentes del Comando Madrileño, como Montse y Rocío, al Casino de la Gran Vía, en pleno centro de la capital. Un edificio con historia que, hasta hace poco, era el círculo mercantil. Ahora mezcla su estilo de primeros del siglo XIX con slots, mesas de póquer y ruletas.
Nuestros agentes recorrieron el maravilloso edificio hasta llegar al salón comedor, un estupendo salón enorme en el que no es nada caro comer o tomar el aperitivo. Un sitio que recomiendo que visitéis.
David Sánchez, Enrique, Rocío Álvarez, Montse, Iñaki, y Endika fueron los primeros que llegaron, más tarde yo me uní al grupo. El ambiente era maravilloso y el salón me llegó a recordar al del lugar donde Bond ¨bautiza¨ su bebida como Vesper.
Como estábamos celebrando el día Bond, quisimos meternos en la temática pidiendo (algunos) una hamburguesa Royale Casino. Otros tomaron otros productos de la carta.
Tras los postres, los cafés, y una charla distendida nos fuimos a vivir la experiencia de ser Bond por un día, a las mesas de juego.
Tras algunas jugadas en varias máquinas tragaperras en las que no hubo suerte, nos dirigimos al ¨plato fuerte¨, las mesas de la ruleta. En ellas pudimos hacer algunas apuestas, en estas fueron David, Rocío e Iñaki los que triunfaron -Felicidades chicos-. En este punto, Enrique tuvo que marcharse, también nos hicimos fotos de grupo, en la mesa, en las escaleras; y en la fachada del Casino.
Una vez que cambiaron las fichas por dinero, decidimos que íbamos a ir al Museo Chicote-un poco más abajo del Casino- a tomarnos unos cócteles, un lugar con una ambientación muy roja y, al que han acudido cientos de famosos, testigo de ello son las cientos de fotos que cuelgan en las paredes del local.
¿Qué estábamos celebrando?, exacto, el Día Bond. Pues, quien esto escribe se tomó dos buenos ¨Vesper¨, el primero de ellos fuerte de ginebra. El resto tomó mojitos (muy DAD) y San Francisco.
Tras tomarse las bebidas, se fueron marchando todos los agentes a sus respectivas casas excepto Rocío y yo, que disfrutamos los dos solos de otra copa.
Ya sobre las 21.30h tocó la hora de la despedida y de dar por terminada la jornada, una día en el que se ha echado de menos a varios amigos y socios del club, de los cuales no mencionaré a ninguno para que no deje a nadie fuera (vosotros sabéis a quiénes me refiero): os echamos mucho de menos.
Un gran día Bondiano, con una compañía inmejorable, pero sobre todo, un inolvidable día para mí. Desde aquí quiero daros las gracias a todos por formar parte de este día tan especial.
