Las chicas Bond de la vigésimo segunda aventura de James Bond
Olga Kurylenko | Camille Montes
Olga Kurylenko interpreta a Camille Montes, una agente boliviana que busca su venganza personal contra el General Medrano, a quien quiere acceder a través de Greene. La esencia del personaje es la de ser una compañera fuerte de Bond más que una amante, con emociones parecidas a las que experimenta 007 pero que es incapaz de expresar.
Elegida por Forster entre 400 actrices por ser la que estaba menos nerviosa, la actriz se alegró tanto de ser elegida que salió a la calle para comprar una botella de vodka. También le alegró no tener una escena de amor con Craig para que los espectadores no desviaran la atención de su interpretación, Kurylenko consideraba ofensivos los personajes floreros y declaró huir de ese estereotipo. Se entrenaría en la lucha con armas durante tres semanas y, según la actriz, su capacidad para enfrentarse a los miedos en las escenas de acción sería lo más destacado en su experiencia como chica Bond.
Gemma Arterton | Strawberry Fields
Agente de campo del MI6 que trabaja para el consulado británico en Bolivia. Fields, descrita por M como una simple oficinista, se toma en serio su cometido y trata de imponerse a Bond cuando se encuentran. Poco después es seducida por 007, con quien se infiltra en la fiesta benéfica de Greene y finalmente muere ahogada en petróleo.
Arterton es una ingeniosa actriz según Forster elegida entre 1.500 candidatas, que describió su papel como un homenaje al de Tracy Bond de Diana Rigg en 007: Al Servicio Secreto de Su Majestad. El nombre de pila del personaje, una clara referencia a la canción de los Beatles «Strawberry Fields Forever», nunca se cita en pantalla y sólo lo descubrimos en los créditos finales.