Los aliados que prestarán su ayuda a 007 aparecidos en la decimonovena aventura oficial de James Bond
Robbie Coltrane | Valentin Zukovsky
Antiguo agente del KGB y aliado de Bond a regañadientes. Los caminos de ambos se cruzaron como adversarios en el pasado (Zukovsky cojea debido a una bala que le disparó Bond) pero forjaron una amistad forzada en Goldeneye, cuando Zukovsky utilizó su estatus de jefe de la Mafia rusa para ofrecer información a 007. Posee y regenta un casino y una fábrica de caviar en Baku.
Zukovsky descubre que él y Bond han sido traicionados por Elektra King – un descubrimiento que resulta en la destrucción de su fábrica de caviar debido a un ataque en helicóptero. Zukovsky demuestra ser un valiente y valioso amigo de Bond al dedicar sus últimos momentos de vida para salvar la de 007.
Claude-Oliver Rudolph | Coronel Akakievich
Jefe de las unidades del ejército designadas para proteger a los científicos encargados de desmantelar la zona de pruebas nucleares en Kazakhstan.
Cree por error que Bond está detrás de un plan para robar las bombas del complejo, lo cual permite al enemigo de verdad -Renard- hacerse con el control de la situación. El error le cuesta la vida al Coronel.
David Calder | Sir Robert King
Magnate del petróleo y dueño de Industrias King, Sir Robert es amigo personal de M.
Cuando su hija Elektra es secuestrada, sigue el consejo del MI6 de no pagar por su rescate. Posteriormente su propia hija planea su asesinato como retribución a su decisión.
Judi Dench | M
Por primera vez en una película Bond, M juega un papel muy importante en el argumento debido a su amistad con el magnate del petróleo Sir Robert King. M tiene un sentimiento de culpabilidad al persuadir a Robert de no pagar la recompensa por su hija secuestrada, Elektra. Cuando Bond supuestamente muere, Elektra pide a M protección personal – una trampa que termina en el secuestro de la jefa del MI6 en Turquía. Aunque cautiva, M se las arregla para ayudar a Bond a desbaratar los planes de sus adversarios.
Esta acertada decisión de los guionistas permite a Judi Dench demostrar aún más sus consumadas habilidades interpretativas.
Desmond Llewelyn | Q
De nuevo, el impaciente rey de los gadgets aparece con un buen número de armas de alta tecnología para su última misión. La escena que comparte con Bond y su nuevo ayudante, se diseñó a modo de emotiva despedida en previsión a un posible retiro del actor. Desgraciadamente, Desmond Llewelyn moriría meses después del estreno en un accidente de coche.
La contribución de Desmond Llewelyn a la serie es incuestionable. Desde su primera aparición en Desde Rusia con amor en 1963, su carrera ha superado cuatro décadas, cinco actores en el papel de 007, e incontables gadgets y armas de última tecnología. Aunque sus apariciones han sido breves, han definido uno de los aspectos claves de la serie.
Samantha Bond | Moneypenny
La interpretación más liberada de Samantha Bond de Moneypenny prosigue con una nueva escena de flirteo con 007. Podemos verla en el Castillo de Thane donde reparte la información de la misión a los agentes 00 y más tarde sugiere a 007 conocer el motivo de su pronta recuperación a manos de la doctora Warmflash.
Michael Kitchen | Bill Tanner
Regreso celebrado de este personaje, a quien habíamos visto por última vez en Goldeneye. Tanner es uno de los miembros del equipo de M de más confianza, y (al igual que en las novelas) un amigo íntimo de Bond. Interpretado de nuevo por Michael Kitchen, Tanner tiene el deber de informar a Bond de que M le ha excluido de la misión debido a las heridas sufridas recientemente.
Colin Salmon | Charles Robinson
Visto por primera vez en la Sala de Operaciones de El mañana nunca muere, el jefe de equipo de M regresa, esta vez en un papel mucho más largo. Ahora deberá realizar una misión de campo y desplazarse con M para escoltarla a Turquía. Robinson se encontrará ayudando a 007 a desactivar una bomba y comunicándole que M ha sido secuestrada.
John Cleese | Ayudante de Q
Cleese aparece por primera vez como un divertido ayudante de Q, y se deja entrever que podría ser su sucesor (Bond incluso lo llama ‘R’ en un comentario gracioso). La muerte de Q aceleraría este proceso, y Cleese se convertiría en el nuevo Q en Muere otro día.
No queda claro si los productores tenían intención de hacerlos aparecer a ambos en sucesivas películas, pero en una entrevista concedida al Daily Express el 3 de junio de 2002, Cleese confesaría tener un acuerdo secreto con el ya entonces difunto Llewelyn, por el que ambos seguirían juntos hasta que Llewelyn alcanzara los 100 años (para entonces tenía 80), momento en el que tendría suficiente experiencia para tomar el relevo del personaje.