Las campañas de marketing, el merchandising y los resultados de taquilla de la tercera aventura oficial de James Bond
«Agente 007 contra el Dr. No» y «Desde Rusia con amor» fueron éxitos muy notables, de tal forma que también fueron noticia en España el rodaje de la tercera de James Bond y su impacto en otros países, lo que abrió el apetito de los espectadores españoles para ver esta nueva película de 007.
En noviembre de 1964, cinco meses antes de su estreno, la revista Fotogramas incluyó un resumen de la película.
La publicación oficial de la distribuidora CB Films promocionaba el estreno presumiendo de los fabulosos récords que había superado esta película en Europa sobre las dos anteriores:
Cuando se estrenó la película, el nombre de Pussy Galore (Montón de chochitos) despertó una gran controversia. Tanto es así que los productores no consiguieron que la película pasara los censores americanos. Entonces, la película se estrenó en Londres y Honor fue presentada al Príncipe Philip. Al día siguiente el títular de los periódicos era «Pussy and the Prince«. Eso fue suficiente para que los censores americanos dieran el visto bueno a la película.
Para cuando finalizó el rodaje de James Bond contra Goldfinger, Sean Connery empezó a perder entusiasmo en la interpretación de 007. Asediado por un ejército de periodistas y paparazzis durante la producción, se volvió comprensiblemente intolerante cuando se le hacían preguntas tontas por periodistas poco informados que pretendían hacerle indistinguible del papel que interpretaba.
Por ello, a parte de la habitual guía para exhibidores que podéis ver haciendo clic aquí y aquí, los productores crearon métodos novedosos para que el resto del reparto también promocionara la película. Honor Blackman iba encajada en un dedo de oro durante los tours publicitarios. Esta absurda baratija requería de guardas de seguridad que tenían que acompañarla a todas partes, incluso al baño. Blackman encontró un recibimiento variado por parte de la prensa a la hora de hablar del nombre de su personaje. Donde quiera que detectara algo de vergüenza en el entrevistador, adquiría un malicioso placer al repetir ‘Pussy Galore’ continuamente. Shirley Eaton se embarcó en un tour internacional destinado a promover su imagen como la más fotografiada ‘Golden Girl’.
Incluso el Aston Martin DB5 cumplió su deber. El coche se probó tan popular que los productores tuvieron que encargar otros dos modelos simplemente para viajar por el mundo en tours publicitarios (incluyendo la Feria Universal de 1964, donde causó sensación entre el público, así como en las Ferias automovilísticas de Barcelona y Bilbao)… aunque también hubiera algún desafortunado incidente. Siguiendo al lanzamiento de la película, Corgi Toys de Inglaterra produjo la primera reproducción del DB5 – y rápidamente se convirtió en el juguete más vendido del año. Meticulosamente hecho, se lanzó el más largo e ininterrumpido acuerdo de licencia en la historia de la industria, ya que Corgi continúa produciéndolos en la actualidad.
Mucho después del estreno de James Bond contra Goldfinger, los productos aún se presentaban para capitalizar el éxito de la película. Puzles rompecabezas y los imprescindibles juegos de mesa estaban disponibles, a la vez que un muñeco de acción de Oddjob (que realmente lanzaba su bombín). Una serie de cartas para niños en Inglaterra causaron un escándalo al ser retiradas debido a la abundancia de mujeres en bikini (su valor actual se estima en 300 libras).
Los productores acompañaron la reposición de la película en 1975 de material promocional (arriba) para los exhibidores que incluía datos técnicos, argumento, frases de publicidad y clichés para prensa. Podéis ver la guía para exhibidores completa de 1975 haciendo clic aquí.
Con James Bond contra Goldfinger, la historia del éxito Bond se convirtió en un fenómeno. Incluso Broccoli y Saltzman no pudieron anticipar la salvaje reacción del público ante la película. En la premiere de Londres, tuvo que usar la fuerza para contener a la multitud que se agolpaba en el cine. En París, una fan obsesionada se lanzó a través de la ventana del Aston Martin que Sean Connery conducía al dirigirse al estreno.
James Bond contra Goldfinger rápidamente amortizó sus costes de producción y las ganancias alrededor del mundo finalmente superaron los 125 millones de dólares – una suma realmente increíble para su época. Durante un tiempo, el Libro Guinness de los Récords citó la película como la más rápida en conseguir beneficios de la historia.
James Bond contra Goldfinger fue ampliamente promocionada en la prensa española y vendió 2 563 360 entradas.
Para su promoción en la prensa, de nuevo se recurrió al genial artista Macario Gómez (Mac).
Fotogramas de 1965:
La película fue re-estrenada en 1975.
Estas son algunas de las críticas de la época:
Hoja del Lunes de La Coruña, 3 de mayo de 1965.
La Noche (Santiago), 12 de marzo de 1966.
El Comercio (Gijon), 1 de mayo de 1965.
Voluntad (Gijon), 1 de mayo de 1965.
El Correo Vasco (San Sebastian), 25 de abril de 1965.
La Vanguardia Española (Barcelona), 18 de abril de 1965.
La Vanguardia Española (Barcelona) , 10 de octubre de 1975 (Reestreno).
Destino (Barcelona), 24 de abril de 1965.
Mundo Deportivo (Barcelona), 19 de abril de 1965.
Diario Español (Tarragona), 3 de junio de 1965.
El Noticiero (Zaragoza), 20 de abril de 1965.
Valle de Elda (Alicante), 12 de marzo de 1966.
ABC Sevilla, 20 de abril de 1965.
Línea (Murcia), 7 de septiembre de 1965.
«1001 Películas que hay que ver antes de morir» (2004, coordinado por Steven Jay Schneider), página 416. Texto de Kim Newman.
Esta película se emitió en TVE el 13 de octubre de 1990, siendo vista por ocho millones de espectadores.
Ha sido emitida en muchos otros canales, manteniendo una alta valoración entre los críticos televisivos.