Las chicas Bond más seductoras aparecidas en la décimo cuarta aventura oficial de James Bond


Tanya Roberts
| Stacey Sutton

 Una vez heredera de la fortuna de la Sutton Oil Company, Stacey vive malos tiempos trabajando como geóloga en el departamento de petróleo y minas de California cuando se une a James Bond. La mayoría de su empresa ha sido adquirida por Max Zorin como parte de su plan para hacerse con el control del mercado mundial de microchips y, cuando rechaza venderle las acciones que le faltan, pone su vida en peligro. Se une a 007 para evitar que Zorin lleve a cabo su plan destructivo.

El personaje de Stacey es el menos inspirado y convincente de cualquiera de las chicas Bond. Poco más hace aparte de quedarse colgada precariamente en ascensores, montañas y puentes gritando ‘¡Ayúdame, James!”. En pocas ocasiones Tanya Roberts –que por otra parte tiene una presencia en pantalla muy sexy– aporta información técnica, causando más risas que credibilidad en sus comentarios.

Fiona Fullerton | Pola Ivanova

 La atractiva agente del KGB Pola Ivanova comparte poco más que un pequeño encuentro con 007 entre las sábanas. Su primer contacto tiene lugar cuando ambos intentan infiltrarse en la refinería de petróleo de Zorin. Cuando sus respectivas misiones se tuercen, ella y Bond terminan en un jacuzzi donde recuerdan los encuentros eróticos que han tenido previamente. Pola se escabulle con lo que cree es la cinta de Bond con las conversaciones de Zorin – aunque descubre que 007 la ha cambiado por una cinta de música ambiental japonesa.

El papel de Pola es interpretado con gran encanto y maestría por Fiona Fullerton, quien podría haber sido una maravillosa actriz principal en una película Bond.